Aunt Martha’s es conocido por su enfoque único de la coordinación de la atención y por su modelo de atención integral, que garantiza que todas las personas a las que atendemos tengan acceso a los servicios que les proporcionan y mantienen su bienestar. Aunque son muchos los factores que llevaron a adoptar este enfoque, nuestra colaboración con la Universidad de Columbia en Nueva York estableció las mejores prácticas y proporcionó una base científica.
En 2002, los Centros de Salud Cualificados Federalmente de todo el país solicitaron esta codiciada oportunidad de trabajar con Columbia, y Aunt Martha’s tuvo el honor de ser uno de los tres elegidos para asociarse con psicólogos e investigadores con amplios conocimientos sobre la depresión adolescente y los trastornos por consumo de sustancias. Nuestras clínicas empezaron a detectar la depresión en las visitas de atención primaria utilizando una versión modificada del Cuestionario de Salud del Paciente-9 (PHQ-9), una evaluación rápida de la depresión utilizada para valorar si los pacientes requerían atención y apoyo adicionales en función de la gravedad de sus respuestas. Este estudio puso a prueba varias formas de mejorar la calidad de la atención de estos adolescentes y adultos jóvenes, haciendo un seguimiento de sus puntuaciones en el PHQ-9 tras la aplicación de un modelo de atención crónica.
Este modelo fomentó un esfuerzo de colaboración entre todos los proveedores: enfermeras, gestores de casos de salud conductual, gestores de datos, médicos y directores médicos para garantizar que se revisaran y abordaran todos los aspectos de la vida del adolescente para mejorar su estado y reducir sus medidas de depresión o trastornos por consumo de sustancias. Mediante el uso de este modelo de atención crónica y el seguimiento de las puntuaciones del PHQ-9, el equipo de Aunt Martha’s y los socios de Columbia pudieron hacer un seguimiento de los resultados positivos de esta coordinación de atención integrada. Los resultados positivos permitieron a los proveedores seguir aprendiendo y adaptándose, satisfaciendo las necesidades de los pacientes adolescentes y de los participantes cuando lo necesitaban, incluida la adopción temprana de la telemedicina y los mensajes de texto para comunicarse de la mejor y más rápida manera posible.